La mejor manera de manejar tu enojo es siendo consciente de esto que te platico. Si vas más allá con tu conciencia para cuestionarte primeramente la causa de tu enojo para luego entender que eres tú el que se hace el principal daño con esa emoción, es más probable que tu reacción dure menos tiempo.
Otra cosa muy interesante sobre el enojo es que provoca que inmediatamente te conviertas en un imán de cosas destructivas y seguro lo has visto en otros o incluso en ti. Muchas veces después o durante de tu enojo, te suceden cosas que aumentan lo que sientes, como consecuencia de esa misma emoción. Por ejemplo, te enojas con alguien, y al salir a la calle descubres que le acaban de poner el candado a tu auto, o alguien te choca, o te habla algún familiar para darte una mala noticia.
Y muchas veces no eres capaz de entender que eres tú quien ayuda provocar esas situaciones aparentemente aleatorias. Así que ya sabes, sentir más o menos enojo depende de ti y aunque no somos superhumanos, podemos hacer conciencia de estas cosas que siguen siendo comprobadas por la ciencia de una manera sorprendente. Esto ha dejado de ser místico o esotérico desde hace años para entrar al área de lo comprobado por la ciencia.